Medibus: Viaje contra toda tempestad
El claxon del taxi siempre llama a las 6: 00 de la mañana. Para Marilín Castillo Flores, mamá de Ernestico, ese sonido que se repite exactamente cada 15 días es más que un simple llamado a la puerta del hogar, responde a la esperanza de una madre que continúa el viaje por la vida de su hijo.
En enero de 2018 Ernesto Alejandro Rivero Castillo debuta con Leucemia Linfoide Aguda (LLA), y tras permanecer ingresado durante cuatro meses, recorre desde Matanzas más de 100 kilómetros junto a su mamá para asistir a consulta médica en el Instituto de Hematología, enclavado en la capital del país.
“No tengo otra forma de viajar a La Habana”, asegura la madre y agrega con una gratitud que se nota hasta en el tono de su voz: “Lo mismo en un ingreso que en un chequeo médico, el taxi siempre está ahí. Llegamos bien temprano al hospital por los análisis y en la tarde empieza la consulta, el chofer del carro de Cubataxi nos espera para traernos de regreso a casa”.
Ernesto ya tiene 11 años de edad y ha mejorado con el tratamiento indicado por los especialistas y el seguimiento médico de rigor que recibe sin falta, gracias al vínculo entre la Dirección Provincial de Salud y la Empresa de Transporte.
DOS MANOS BIEN ESTRECHAS
Desde hace varios años la Dirección de Salud garantiza el traslado de personas que necesitan someterse a algún procedimiento especial o acudir a turnos médicos en los hospitales de la cabecera provincial y de La Habana, por la complejidad de sus patologías.
En declaraciones a Girón, Ailuj Casanova Barreto, directora de Asistencia Médica, explica que el servicio de Medibus constituye una prioridad y aclara que a pesar de las limitaciones con el combustible, debido al recrudecimiento del bloqueo, se ha logrado mantener dicha iniciativa.
“Más allá de las limitaciones está asegurada la transportación de casi un centenar de los pacientes oncopediátricos hacia centros médicos de La Habana, algunos con frecuencia semanal”, destaca la directiva.
Maritza Fuentes, abuela de Roberto López Llopiz, menor con LLA, agradece la calidad de esta transportación especial en autos muy confortables y comenta que “nunca se ha interrumpido, ni siquiera en la etapa de limitaciones energéticas”.
La doctora detalla que a los restantes pacientes de los 13 municipios que requieren el servicio se les garantiza el transporte en ómnibus escolares. El personal de Asistencia Médica de cada localidad ocupa un rol decisivo al responder a la solicitud de inscripción, de acuerdo con los documentos médicos.
De enero a la fecha se han beneficiado más de 5 650 enfermos, quienes viajan con acompañantes cuando lo precisan y un personal de salud al frente de la guagua para apoyarlos en el recorrido de ida y vuelta a sus territorios.
“Se les concede preferencia a los casos de oncología, del Programa de Atención Materno Infantil, afecciones cardiológicas, cirugías ortopédicas, que necesitan una atención ya sea en el Hospital Provincial Faustino Pérez, el Servicio de Oncología, el Pediátrico o Maternidad Provincial”, afirma Casanova Barreto.
¡BENDITO SEA EL MEDIBUS!
En un parquecito de Versalles Telma Fernández Nodarse espera el medibus de Jovellanos. Ella lucha contra el cáncer a diario, cuando se somete a una terapia en el centro oncológico y fuera de él, porque siempre le sonríe a la vida.
“Es una enfermedad que me tocó, pero no puedo quejarme también me tocó el mejor hospital y el mejor personal de salud. El trato es buenísimo, la responsable de los pacientes siempre pendiente de todos, incluso el lunes pasado tuve quimioterapia y esperaron por mí hora y media”, cuenta.
Telma es una de las 240 personas que viaja a diario en los medibus durante la actual coyuntura, sin embargo no escapa de las afectaciones, aunque impera la voluntad de ayudar.
Luis de la Caridad Enrique Morales, director de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Transporte Escolar, expresa que han recurrido a diversas alternativas para afectar lo menos posible a los pasajeros, ante la situación actual que enfrenta el país.
“La UEB trabaja con el 80 por ciento del parque de vehículos debido a la escasez de diesel. Entonces concentramos algunos pacientes de municipios cercanos en una misma guagua y acortamos el ciclo de los Medibus para asumir el pase de los becados los viernes.
“Los municipios que antes contaban con cinco salidas semanales, hoy tienen cuatro, es decir, de lunes a jueves, excepto Jagüey Grande y la Ciénaga de Zapata que disponen del servicio lunes, miércoles y jueves. En el caso de la ruta Matanzas-Habana sale lunes, miércoles y viernes. También se retoma Jagüey Grande-Habana los martes”, especifica Enrique Morales.
Según Miriam Armas Hernández, residente de la comunidad Potrero Viejo, Jovellanos, este servicio es vital, gracias a él asiste al centro médico para someterse a las radiaciones. “Sin embargo el viernes falla el traslado y es un día muy importante, porque nos hacemos análisis y luego siguen las radiaciones para que el médico valore el efecto del tratamiento”.
“Me es difícil venir por la calle, tengo una sonda permanente hace más de un año, entonces debo alquilar un auto para que me traiga, no hay otra opción. Además ese día tenemos que llegar bien temprano para el chequeo”, manifiesta Fernández Nodarse.
“Las radiaciones provocan un grupo de malestares, resulta muy incómodo venir embarcado. Si existe alguna posibilidad sería valioso que al menos nos concentraran en una guagua para venir los viernes, así no perder el tratamiento”, sugiere Miriam.
El bloqueo golpea fuerte, eso lo saben bien los familiares y pacientes como Marilín y Telma que viajan en la popularmente conocida “guagua de los turnos médicos” o en los taxis, y confían plenamente en la voluntad territorial y estatal de proteger ese sensible servicio.

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